Neuroestimulación interactiva no invasiva

La neuroestimulación interactiva inteligente es una novedad en el campo de la fisioterapia, dirigida al tratamiento de pacientes con dolor crónico o agudo. Es una técnica que ofrece excelentes resultados, con una importante reducción del tiempo de recuperación y rehabilitación, siendo muy beneficioso y reduciendo, también, la necesidad del uso de fármacos o disminuyendo su ingesta.

Numerosos estudios han probado sus grandes beneficios en el tratamiento de patologías como la lumbociatalgia crónica o la epicondilitis, pero puede ser aplicada en muchas más dolencias o enfermedades traumatológicas y musculares.

La técnica de la neuroestimulación interactiva no invasiva

Los dolores crónicos condicionan mucho la vida del paciente y requieren de un tratamiento eficaz que ponga fin a la patología o minimice la intensidad del dolor. Existen distintas propuestas para abordar esta problemática desde muchos campos de la medicina. No obstante, algunas perspectivas psicológicas han ido ganando terreno, tratando de afrentar el problema desde las técnicas cognitivas, el condicionamiento operante, la hipnosis o la neuroestimulación.

La técnica de neuroestimulación interactiva se fundamenta en la relajación y la estimulación neurológica para reducir el dolor de los pacientes. Es una técnica relativamente frecuente, que está influenciada por el método de relajación progresiva de Jacobson y Schultz. Estos pueden ser considerados los precursores de la misma. En 1970 se comenzó con el uso de la relajación progresiva dentro de la concepción multidisciplinar del tratamiento del dolor crónico o agudo. Es una técnica que ha ido ganando fuerza porque no es invasiva. Se trata de una terapia inocua, simple y de bajo coste, que reduce la ansiedad y la tensión muscular; contribuye a romper la barrera del dolor y la tensión, que originan todavía mayor dolor.

Esta terapia está enfocada a activar los recursos de auto-regulación que tiene el propio organismo del paciente, de forma que alivia considerablemente el dolor. Este tipo de neuroestimulación interactiva tiene la gran ventaja de que se puede ir ajustando dinámicamente, según vayan entrando en contacto los electrodos con el tejido corporal. Además, permite ir actuando sobre el componente subyacente de ansiedad y depresión, pues se ha constatado una gran disminución en la intensidad y la frecuencia del dolor, mejorando la calidad de vida de los individuos.

¿Para qué podemos utilizar la neuroestimulación interactiva?

Esta técnica puede usarse para la relajación y la reducción del dolor, aun siendo el foco del dolor muy variable. Se han demostrado excelentes resultados en el tratamiento de la lumbociatalgia crónica y también de otras patologías como:

• Epicondilitis
• Síndrome del piramidal
• Lumbalgias
• Dorsalgias
• Cervicalgias
• Síndrome del túnel carpiano
• Claudicaciones MMTI
• Otras patologías ATM

Además, también se ha probado con excelentes resultados en el tratamiento de lesiones de rodilla, hombro o tobillo, así como en la rehabilitación postquirúrgica, especialmente en aquellos individuos que llevaban prótesis o que fueron sometidos a artroscopias.

Los estudios y resultados de los mismos demuestran que el entrenamiento en la relajación progresiva y la neuroestimulación generan una reducción en la intensidad del dolor, ya que ayuda también a reducir la espasticidad e hipertonía del paciente que ha sufrido una lesión en el sistema nerviosos, mejorando su funcionalidad.

Es, en definitiva, una gran técnica en la rehabilitación funcional de un amplio abanico de dolencias agudas y crónicas.

Imágenes: Javi_Indy / Freepik

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